Su característica principal es el color de su lengua, la cuál es de un todo negro azulado. También, llama la atención su forma de andar un tanto distinguida, debido a que sus patas traseras son rectas. Tiene orejas pequeñas respecto a su cabeza, la cual es bastante ancha, con el cráneo aplanado y el hocico redondeado. Su cola también es característica debido a su forma curvada que cae sobre el dorso. Tiene un pelaje muy abundante por todo el cuerpo, lo que le da un aspecto de oso o león y se puede encontrar en varios colores como negro completamente, marrón oscuro, crema o leonado, pero siempre sin manchas.
Suelen ser perros muy tranquilos y cariñosos, aunque a veces puede ser distante e independiente. Pero lo que sobre todo resalta en él, es la lealtad que tiene hacia su dueño, que le hace no separarse de él en ningún momento. Esto puede provocar desconfianza ante extraños que se acerquen a su dueño o incluso que vayan a su casa. Tiene un carácter un poco fuerte, que hace que se lo piense antes de obedecer, aunque generalmente no suelen dar ningún problema. Son fáciles de educar, ya que son muy sensibles y harán lo que su dueño les ordene.
Con respecto a los cuidados de este tipo de razas, es necesario desenredar el pelo cada día con un peine metálico y bañarlo cada seis meses. Debido a la cantidad y grosor de su pelaje, no es recomendable que esté en zonas de mucho calor. Se adapta muy bien a zonas de interior como pisos pero es importante que salga a pasear varias veces al día para hacer ejercicio, muy necesario en esta raza.
Imágenes/Flickr: kitty green66, Luigi Borromeo, dSenestre.
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